Fue despues de aquella debastadora tormenta cuando Frank decidio partir, dejando atras ese sabor amargo de los ultimos meses cuando una nube negra cubrio el horizonte que se apreciaba desde la ventana de su habitacion en aquella pequeña choza rustica que habia construido el mismo ya hace un par de años. La lluvia pertinaz comenzo poco a poco a derrumbar su morada y con ella todos sus sueños, las debiles gotas carcomieron poco a poco cada viga, mientras los riachulos formados por el agua y el lodo agotaron la dureza de los cimientos hasta que despues de unos dias la casa sucumbio al reiterado maltrato.
Destrozado Frank tomo sus pocas pertenencias secas y rescatables y dando un vistazo hacia atras emprendio un largo camino hacia la tierra de Nowhere en busca de la identidad que habia perdido con el desastre.
El camino fue largo y doloroso, pasando por tierras ardientes quemando sus pies, valles espinozos cortando su piel y una soledad inmesa que martillaba su alma. Sin darse cuenta del camino circular que lo traeria de vuelta a su lugar.
Al encontrarse de nuevo con su choza las lagrimas de aquella partida volvieron a surgir, solo que en esta ocasion no era el dolor lo que llenaba sus ojos, sino una alegria inmensa de encontrarse con lo unico que era realmente suyo: Su hogar. De inmediato corrio hacia ese lugar donde el solo respirar lo alentaba a seguir luchando, a volver a creer y fincar nuevamente sus sueños.
El cansancio del viaje que habia realizado lo tumbo en el suelo y fue ahi donde por primera vez dormia tranquilo, sin el temor, ni el dolor que habia padecido durante su larga jornada. El amanecer lo desperto, trayendo consigo la esperanza de un nuevo comienzo.
Sin esperar mas Frank comenzo nuevamente a levantar cada piedra, cada rincon en donde habia encontrado el calor de un hogar. A los poco meses nuevamente la choza lucia radiante, como en aquellos viejos y felices tiempos, como si la tormenta jamas hubiera pasado por tan sagrado lugar. Observaba a su alrededor y veia nuevamente cada ventana y cada detalle como los que encontraba en la casa anterior de hecho aun mas realizados y hermosos.
Al caer la noche ya recostado en su cama un escalofrio recorrio su cuerpo, de inmediato trato de buscar refugio en sus propios brazos sin encontrar un poco de calor en sus debiles brazos, asombrado del espantoso frio que reinaba en la habitacion a pesar de la hoguera que mantenia encendida todas la noches. Por la mañana aun era imperante tan escalofriante temperatura obligando a Frank a refugiarse en la pradera buscando un poco de calor.
Su cabeza a diario daba vueltas tratando de encontrar el porque de tan extraña situacion, recorriendo minusiosamente cada espacio sin poder descubrir la causa de la espontanea calidez en su amado hogar, pasando dias enteros sin poder entender el como de tan extraño suceso, en que se habia equivocado al reconstruir su amada choza, si al parecer era mas acogedora que antes.
La esperanza de algunos rayos que entraban timidamente en algunas ocasiones por la ventana calentando la habitacion hacian sonreir a Frank quien trataba de olvidar el frio de los dias anteriores por lo menos por unos instantes.
Por las noches entre lagrimas Frank dormia a pesar de tener el cuerpo congelado, pero con el solo pensar en los breves instantes en el que el sol irradiaba un poco su hogar lo hacian dormir soñando con su hermosa morada.
